miércoles, 30 de marzo de 2011

Masters 1000 Miami: David contra Goliath

La jornada de octavos de final de ayer en Miami nos dejó varios resultados para comentar de mano de los tres grandes dominadores del circuito a estas alturas de la temporada: Federer, Nadal y Djokovic.

Djokovic se impuso con la autoridad que últimamente le caracteriza a su compatriota Viktor Troicki. A Troicki al menos le queda el consuelo de no haber recibido ningún set en blanco por parte de su compañero en el potente equipo de Copa Davis serbio. Su próximo oponente será el sudafricano Kevin Anderson. En un principio, la diferencia de ranking –el 2º frente al 40º– hace pensar que el partido será un paseo de Djokovic. Pero por mi parte tengo la esperanza de que Djokovic se encuentre un hueso duro de roer que le ofrecerá batalla tal y como sucedió recientemente con Nadal en el Masters 1000 de Canadá del año pasado. Con su juego ofensivo basado en saque, Anderson intentará que su rival no coja ritmo con punto cortos y un juego vertical. Quién sabe, quizá el sudafricano sea capaz de darle un disgusto a Djokovic como el que le dio en este mismo torneo hace tres años en la segunda ronda. Nunca se sabe, pero al menos puede decir que el Frente a Frente le favorece.

Getty Images
Por otro lado, Federer y Nadal solventaron con comodidad sus compromisos ante Rochus y Dolgopolov, respectivamente. Más allá de comentar el devenir de los partido, hay una cosa que nos llama la atención: la diferencia de altura. Podrá parecer anecdótico, pero no hay ningún jugador por debajo de los 180 centímetros entre los mejores. Salvo por la excepción de nuestro David Ferrer "Ferru" (175 cm.) e incluso Albert Montañés (175 cm. también), todos los jugadores Top son altos y con un físico poderoso. Nadal es el paradigma de la fuerza y Del Potro lo es de la altura. Con sus 168 cm. se puede afirmar con seguridad que Olivier Rochus es el jugador más bajito del circuito profesional. Dolgopolov no deja de ser excepcional no tanto por su altura –180cm.– como por su físico.


Más allá de lo circunstanciales que puedan parecer estos datos resultan muy reveladores para determinar la moda del tenis actual en cuanto a físico. El prototipo de jugador ha cambiado considerablemente desde los inicios del circuito ATP. No queda apenas huella de los Santanas o los Bertoluccis, jugadores que basaban su juego en la técnica y la estrategia por encima del físico. Salvando las diferencias, la planta y la técnica de Federer nos pueden hacer recordar esos lejanos momentos del tenis: el aroma de los mosqueteros. Ahora tenemos torres esculplidas por incontables horas de gimnasio. Mirad a Verdasco, por ejemplo: ¡se habla que puede levantar 350 kilos en sentadilla! Aunque el mejor ejemplo de tenista actual, tanto por parámetros como por juego, es Andy Murray, que ha conseguido una agilidad increíble con sus más de 190 cm. de estatura.

David Callow - SI/Getty Images
Y es que parece que en la actualidad David ya no vence a Goliath. Pero el calendario es cada día más exigente y el nivel competitivo mayor, así que todo sea por el progreso del deporte sano.

martes, 29 de marzo de 2011

Masters 1000 Miami: Llueve

En esta jornada del torneo de Miami han tenido lugar algún que otro resultado interesante que comentar. Nadal ganó a Feliciano por 6-3 6-3 con una gran superioridad que, no nos engañemos, era de esperar. Si la lucha hubiese sido frente a las cámaras la cosa habría sido distinta. Lo comenta Javier Martínez en una entrada muy irónica en su blog: uno es un genial deportista y el otro también es genial pero aún no sabemos exactamente en qué.

Al Bello - Getty Images
Cabe mencionar también la sorprendente derrota de Del Potro ante Mardy Fish, pese al buen momento de forma del que disfrutaba. Además, Mayer ganó a Almagro –en un partido extraño sólo posible gracias a la inestabilidad mental del murciano– y Ferrer hizo lucir sus galones ante un apagado Marcel Granollers que venía de darnos una alegría ante Michael "mosquetero" Llodra.

Mike Ehrrman - Getty Images
Una noticia curiosa que pulula por la web de la ATP es que Mardy Fish, 15º del mundo, está a una victoria de alcanzar a Roddick, 8º, pero que perdió en segunda ronda como defensor del título. De ser así, Roddick dejaría de ser el americano mejor calasificado, posición que ocupa desde el año 2002, en favor del jugador que nos sorprendió el año pasado en el torneo de Cincinatti. Momentos delicados para el tenis estadounidense, que no es capaz de suplir con jugadores su abundancia de torneos. Las esperanzas se centran en la perla de su cantera: Ryan Harrison. Su sutil parecido al juego de Agassi y Connors ha hecho que el tenis americano deposite en él su atención. Esperemos que la presión no pueda con él y que acabe de cuajar como tenista. Seguro que su entrenador, Pepe Higueras –ahí es nada– le ayudará mucho para mejorar. Desde luego: el chaval apunta maneras de crack.

Pero en una jornada tan emocionante como esta el hecho que más resalta no ha sido otro que las interrupciones por la lluvia. El juego ha estado casi una hora detenido en las instalaciones de Cayo Vizcaíno por un chaparrón. Y yo me pregunto una cosa: ¿cómo puede ser que el torneo de Miami –según muchos el 5º Grand Slam– no disponga de al menos una pista cubierta? Es sencillamente ridículo. Todos los partidos parten ya con una hora de retraso con respecto a las estimaciones. Y esto no sólo es un fastidio para los jugadores y el público asistente. El daño más grande que se le hace al tenis con las interrupciones viene de parte de las retrasmisiones televisivas. Más de una vez nos hemos hartado de esperar a que escampe el chaparrón y hemos dejado un partido a medias.

Al Bello - Getty Images
Los torneos deberían tener al menos una pista cubierta. Y mucho más este torneo de Miami, con una climatología tan húmeda y unos beneficios que no es que sean precisamente escasos como para que los recogepelotas tengan que secar las líneas con toallas. Ya lo hizo Hamburgo en su día. Y Madrid, Australia, Wimbledon, Halle... Es imperdonable que torneos como Miami, el US Open o Roland Garros no dispongan de pistas cubiertas. 

Así que, ahora que todos –salvo algunas federaciones en la Copa Davis– se han adaptado al ojo de halcón, deberían hacer lo mismo con los techos retráctiles. Caros, sí; pero infinitamente útiles. No queremos más partidos deslucidos por la lluvia como la final de Roma del año pasado.

Masters 1000 Miami: Sorpresas solo a medias

Los dos primeros Masters 1000 de la temporada han sido torneos propicios para las sorpresas. Muchos favoritos están perdiendo sorpresivamente a las primeras de cambio contra jugadores con los que normalmente no lo harían. El catálogo de derrotas estrepitosas es cuanto menos sorprendente.

En Indian Wells, Tsonga perdió contra Malisse, Almagro contra Montañés, Söderling contra Kohlschreiber, Verdasco contra Querrey. Hasta aquí todo más o menos normal. La sorpresa monumental llegó con la derrota de Andy Murray ante el estadounidense Donald Young, situado en el puesto 128 del ranking ATP. En Miami, más de lo mismo: Cuevas ganó a Roddick (con molestias), Verdasco perdió contra Andújar (atentos a su cara en la foto de su perfil en la ATP) y –batacazo– Murray perdió contra Bogomolov, el número 118 del mundo, procedente de la previa.

La decepción de Murray ha sido tan grande que ha decidido marcarse un cambio de aires y ha roto su relación profesional con Álex Corretja. Esperemos que este cambio no suponga el regreso de este a TVE; no al menos siempre que eso signifique desplazar al gran Tomás Carbonell: menos famoso pero mucho mejor comentarista.

Miami Herald - McClatchy-Tribune
Pero no nos engañemos: la sorpresa tampoco está siendo mayúscula. Salvo por las derrotas de Murray, el monopolio de los mejores en las rondas finales sigue igual. No está teniendo lugar, ni mucho menos, un traspaso de poder entre los actuales dominadores del circuito. Muestra de ello es la trayectoria de Djokovic estos primeros compases de la temporada. No sólo es que lleve 20 victorias consecutivas –récord en los últimos 25 años– sino que además ha sido capaz de encajar un rosco a 4 de su últimos 7 oponentes (Golubev, Gulbis, Troicki y Blake). 


Matthew Stockman - Getty Images
La superioridad exhibida por el serbio está fuera de toda duda. Habrá que tenerlo muy en cuenta a lo largo de este año en la lucha por el número uno. Todo dependerá de su rendimiento en la gira de tierra batida. Si hace una buena temporada de tierra, podría acercarse considerablemente a un Nadal que lo defiende todo hasta llegar a Wimbledon. Por contra, Djokovic no defiende grandes resultados. Y tampoco descartemos a Federer, que tiene amplio margen para mejorar sus registros del año pasado, especialmente en Roland Garròs y Wimbledon.
La batalla por el número 1 está servida.

Masters 1000 Miami: Berlocq-Berdych

Como ya sabréis todos está teniendo lugar el Masters 1000 de Miami, que puede verse en abierto por TVE (TDP y TVE-HD). Pese a que hubiera sido mi deseo, no he podido ver todos los partidos de la jornada por el canal público. Pero creo que se puede afirmar con rotindidad que el mejor  partido de la jornada –que aún no ha terminado– ha sido el Berlocq-Berdych.

Tomas Berdych: ATP 7º
Un partido a priori de trámite entre un Top Ten consolidado como Thomas Berdych y un poco conocido Carlos Berlocq ha resultado un verdadero espectáculo. Dos sets de tenis de alto nivel y constantes idas y venidas que se han prolongado durante unas dos horas y 20 minutos. El marcador final fue 7-6 7-5 para el Berdych, que tuvo que ofrecer su máximo rendimiento ante el sorpresivo argentino.

Carlos A. Berlocq: ATP (dobles) 71º

Nadie esperaba –ni yo mismo– que un jugador más allá del puesto 70 del ranking de la ATP (de dobles, para más inri) pudiera poner en tales complicaciones al número 7 del mundo y vigente finalista de Wimbledon. Y no sólo es que el partido fuese de un marcador apretado y de gran tensión, sino que el juego desplegado por ambos jugadores fue espléndido, con golpes espectaculares y pocos errores no forzados.

El primer set fue una auténtica locura: absolutamente genial de ver. En su hora y veinte minutos de duración hubo tiempo para que Berlocq se adelantara por un break y sacara para ganar el parcial. El revés y el saque de Berlocq funcionaban a las mil maravillas y Berdych se quedó impotente ante el vendaval que se venía encima. Pero en ese momento, un Berdych que ya venía dando avisos se repuso y consiguió igualar el marcador. La igualdad se mantuvo hasta al tie-break: la apoteosis del set. Berlocq desperdició varias bolas de set –o más bien Berdych las salvó– y el checo acabó imponiéndose en el set con un juego vertical vistoso y contundente y algún que otro golpe magistral con el que demostró su enorme talento.

El segundo set empezó con cierta distensión. Los saques comenzaron a mandar y Berlocq parecía menos brillante y algo menos motivado en los primeros juegos. El panorama parecía ideal para Berdych, que acabó anotándose el break. Pero en ese momento se unieron una cierta relajación del checo y un regreso del argentino, y el partido se volvió a igualar. Estos juegos finales nos ofrecieron, nuevamente, momentos del mejor tenis. A la segunda vez que Berdych sacaba por el partido consiguió no ceder su saque y doblegar a un rival que en ningún momento se dio por vencido ni se arrugó ante uno de los mejores tenistas del momento.


Otros partidos:
El otro resultado que cabe la pena mencionar, en una jornada en la que tanto Federer como Nadal también han pasado de ronda, ha sido la victoria cómoda –apabullante, se podría decir– de Juan Martín del Potro sobre nada más y nada menos que Robin Söderling, el número 4 del mundo (Noticia ATP). El tandilense, después de casi un año fuera de las pistas por una lesión de muñeca, parece estar recuperando la forma que le llevó a ganar el US Open hace dos años. Y, sin puntos que defender en el resto de la temporada, su recuperación puede ser fulgurante.

La conspiración "Rafa"

Me váis a permitir una entrada que rompe un poco con la que va a ser la temática del blog. Como habréis podido apreciar, el título del blog es cuanto menos curioso. A primera vista podría parecer que simplemente soy un aficionado al tenis que le tiene inquina a Nadal, pero nada más lejos. La motivación de este título es otra bien distinta.

¿No os habéis fijado alguna vez en que los medios sólo hablan de tenis para hablar de Nadal? Es curioso cómo te puedes pasar meses y meses sin oir hablar de tenis y, de repente, aparece un titular que dice que Nadal ha ganado un título. Y claro, en esta sociedad de la desinformación, todos tan contentos. Pocos nos damos cuenta de que en realidad Nadal sólo es un tema recurso de la agenda mediática. Porque los medios españoles no hablan de tenis sino de Nadal. No: no son sinónimos.

Clive Brunskill - Getty Images

Hay otro aspecto que no deja de ser curioso a los ojos de un aficionado al tenis meramente objetivo. Resulta que Nadal se ha convertido en un baluarte nacionalista. Los informativos deportivos lo utilizan en sus cabeceras porque les sirve a la perfección para reflejar el sentimiento nacionalista deportivo español sin la necesidad de recurrir al fútbol que, aunque arrastra a las masas, es muy dado a las rivalidades. Lo más fácil es pensar que lo hacen porque es un ejemplo de deportividad, humildad y esfuerzo. Puede que también haya algo de esto, pero el principal motivo es el que he mencionado antes.

No voy a ser yo el que quite méritos a Nadal. Es un grandísimo jugador y no tiene ninguna culpa del uso que se le está dando a su imagen. Pero me resulta imposible ignorar los hechos cuando se nos muestran con tanta evidencia como este.

lunes, 28 de marzo de 2011

Calentamiento y moneda al aire

No es posible combatir contra los elementos; no desde luego con éxito. Y yo no voy a ser una excepción. Tras mucho tiempo con la idea rondando por mi cabeza me he decidido a dar el paso definitivo y crear, por fin, un blog de tenis.


Hace ya muchos años que vivo gracias al tenis: dedicándole la mayor parte de mi tiempo libre y también muchas horas que en teoría no estaban libres. En estos años de dedicación por el maravilloso deporte de la raqueta he conseguido comprender un complejo mundo que va mucho más allá de lo poco que los medios de comunicación nos cuentan. Y he acabado llegando a una conclusión: ¿por qué no trasmitírselo a todo aquel interesado en ello? Sé que difícilmente me ganaré la vida con esto. Pero la ilusión y el interés son lo que más cuenta.

Como carta de presentación sólo diré que no soy un aficionado al tenis estándar, es decir, a la idea del tenis que los medios nos intentan inculcar. Tengo un concepción bastante insólita en mi generación de este deporte, tanto como jugador como aficionado. Creo que el tenis es y debe seguir siendo un deporte de caballeros  –ojo, que no de élites. Respeto profundamente a los demás deportes, pero el tenis es distinto, y no puede pretenderse que su tratamiento sea el mismo.

En este blog os informaré de la actualidad del tenis mundial con una una visión distinta de la predominante. Así que, sin ser un blog demasiado especializado, intentaré alejarme de entradas banales simplemente con los resultados, tal y como sucede en gran parte de las noticias que circulan por Internet y los demás medios. Analizaré los partidos y ese "algo" más que Rafa que a los medios se les escapa casi siempre.

¡Seáis bienvenidos!